El día que sepa escribir no me importará que me leáis. Mientras tanto, tomaros esto como una acumulación de sentimientos.
Nos sobraron balas; nos faltaron palabras. Nos sobraron reproches; nos faltaron caricias, miradas y un par de noches.
Nos sobraron miradas; nos faltaron caladas. Nos sobraron voces; nos faltaron besos, sonrisas y un par de roces.
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