El día que sepa escribir no me importará que me leáis. Mientras tanto, tomaros esto como una acumulación de sentimientos.
domingo, 20 de diciembre de 2009
Un país en guerra.
Es este jodido planeta que no para de dar vueltas, o soy yo que no paro de darlas mientras caigo por este seco, polvoriento y arenoso terraplén. La verdad es que todavía siento como el fuego y la pólvora quema mi pecho. Todavía puedo ver la cara de miedo de ese joven soldado disparando a todo lo que se movía para no tener que responder el porque de una bala suya en la cabeza de mi hijo.¿por qué un niño de seis años no puede jugar con palos en forma de pistolas en un país en guerra? Ya no puedo explicárselo. No me da tiempo para nada mas, ya he rezado lo suficiente durante toda mi vida, lo único es pensar cómo le digo a su madre que venimos a hacerle compañía, que tan sólo hemos podido estar un par de meses sin ella, que hemos caído en el mismo error de querer seguir viviendo en un país en guerra.
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